Se recomienda utilizar 1 vez por semana. Crea una pasta con arcilla y agua o aceite vegetal, mezcla una cucharada de mascarilla por un cucharada de agua. Aplica con una brocha o espátula sobre el rostro y espera unos 15 minutos o hasta que seque (en el caso de haber mezcaldo con agua) y retirar con agua tibia.

Ingredientes Clave

• Arcilla blanca: Calma e hidrata la piel. Limpia y exfolia la piel. Elimina impurezas. Regula el sebo. Estimula la renovación celular. Difumina manchas
• Arcilla roja: Cicatriza heridas. Controla la producción de sebo. Regenera los tejidos. Ayuda a reducir arrugas y manchas. Combate la inflamación. Protege la piel de agentes externos. Revitaliza la piel.
• Ginkgo Biloba: Combate los efectos negativos de los radicales libres y el envejecimiento prematuro. Tiene un efecto tonificante, descongestivo y antiinflamatorio. Ayuda a hidratar la epidermis y aumentar la renovación celular. Combate la aparición de manchas por la híperpigmentación de la piel. Aporta firmeza y turgencia a la piel.
• Té verde: Antioxidantes: Contiene vitaminas C y E, que son antioxidantes naturales, también catequinas, que pueden ayudar a reducir la inflamación. Es un gran antibacteriano natural. Rejuvenece las células de la piel y retardar el envejecimiento prematuro. Protege la piel contra los rayos solares y alivia las quemaduras.
• Aceite esencial de rosas: tiene propiedades hidratantes, regeneradoras y calmantes. Ayuda a equilibrar la producción de aceite, reduce la inflamación, y su aroma suave puede tener propiedades relajantes.